Es natural para empezar este recorrido investigativo, que lo hagamos desde la perspectiva de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, que, a su vez, nos llevan a poner la mirada en los usos que hoy en día hacemos de ellas. Actualmente, nuestro diario vivir se encuentra influenciado, por decirlo menos, por lo digital, de manera que, por poner un ejemplo, sabíamos que alguien estaba bien luego del desastre natural del 16 de abril de 2016 en Ecuador, no porque lo hayamos llamado por teléfono para saberlo, sino porque se activó la herramienta Safety Check de Facebook, que sirve para comprobar y difundir el estado de seguridad durante emergencias. Con ello, quedaba la certeza de que cada persona que activaba la herramienta, realmente se encontraba a salvo; tal vez, porque consideremos que en las redes sociales se encuentra la información real de necesitamos, o al menos eso es lo que esperamos.
Tomamos como punto de partida lo ocurrido con el terremoto en Ecuador en 2016, pues nos ayuda a ejemplificar lo vivenciado a través de las tecnologías, en especial de las redes sociales en un momento clave para cada uno de los ecuatorianos, en el cual era vital estar informados. De acuerdo al breve recuento que la Periodista y Asesora de Comunicación, Ángela Paloma Martín (2016), presentó en el diario El Telégrafo al mes de la tragedia: en la primera etapa fue el Twitter la principal fuente de información, desde múltiples fuentes tanto oficiales como de ciudadanos; y así, fueron activándose otros canales digitales, como el Facebook, en el cual se activó la función Safety Check para reportar la situación de seguridad de quienes registraban estar en territorio ecuatoriano.
De igual modo, el gobierno ecuatoriano, desde la entidad que en el año 2017 fue suprimida por decreto presidencial, la Secretaría Nacional de la Administración Pública, en coordinación interinstitucional con Ministerios, Secretarías y Servicios, se vio en la tarea inédita de gestionar una comunicación de crisis que articulara varios soportes tecnológicos, con la finalidad de transmitir mensajes específicos y que básicamente permitieran mantener a la ciudadanía informada de manera correcta. Es decir, llegar a los ciudadanos con datos oficiales que, a su vez, minimizaran el impacto de las falsas alarmas o noticias amarillistas que al poco tiempo ya se encontraban circulando a través de esos mismos canales, tales como Facebook, Twitter y Whatsapp, principalmente.
Ahora bien, un soporte comunicacional importante lo constituyeron también todos los sitios web oficiales del gobierno, en las cuales se centralizaron mensajes de donaciones, prevención ante réplicas y cifras, precisamente con el objetivo de anclar información oficial a la que los ciudadanos pudieran referenciarse, en medio de la proliferación de mensajes de diferentes fuentes, no necesariamente confiables. Sin embargo, ¿qué preferían los ciudadanos a la hora de obtener información relacionada con el terremoto? ¿Realmente acudían a los sitios web u optaban por las redes sociales?
En ese sentido, vale mencionar que, según el estudio más reciente sobre Tecnologías de la Información y Comunicaciones realizado en Ecuador por el Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC, 2016, p. 19), “el 38,0% de las personas usó Internet como fuente de información, mientras el 31,5% lo utilizó como medio de comunicación en general”. Así mismo, el estudio mencionado afirma que el 25,28% de la población aseguró utilizar redes sociales, no obstante, el abordaje del tema resulta escueto al no profundizar en qué redes sociales son las que prefiere la población y el tipo de usos que les da, ni develar qué otros medios digitales son utilizados, en particular cuando se trata de informarse.
Los objetivos de este TFM fueron:
Descubrir si las fanpages gubernamentales en Ecuador han reemplazado a los sitios web gubernamentales, en tanto medio digital que los ciudadanos eligen para informarse sobre las acciones o gestión del gobierno nacional.
Conocer si los ciudadanos están dispuestos a utilizar las fanpages gubernamentales como medio digital principal para informarse sobre la gestión del gobierno nacional.
Conocer el valor percibido por la ciudadanía con relación al contenido compartido en las fanpages gubernamentales
Una vez que hemos hecho el recorrido por las diferentes instancias de la presente investigación, es relevante recordar que se trató de un estudio de tipo exploratorio, a través del cual pudiéramos poner sobre la mesa de discusión el uso de los medios digitales del gobierno por parte de la ciudadanía. En ese camino, surgieron varias interrogantes con relación a su relevancia para el ciudadano común, a pesar de que las estadísticas hablen de liderazgo e influencia en las redes de personajes políticos ecuatorianos, o de que los expertos recomienden elaborar estrategias digitales de manera integral para llegar mejor y a más audiencias. La pregunta de cajón que en esta etapa deberíamos hacernos es: ¿Los ciudadanos acuden realmente a los canales digitales del gobierno?
Ahora bien, posiblemente muchas otras preguntas deben haber surgido al lector de este estudio, en tanto los resultados muestran opiniones que a ratos se contradicen. Como el hecho de que una gran mayoría prefiera las redes sociales por ahorro de tiempo, pero que al mismo tiempo consideren que existen un sesgo de información. ¿Es acaso este un aspecto que solo atañe a los medios gubernamentales? Quienes entienden más de cerca la dinámica de los medios de comunicación, en general, podrán estar pensando en este momento que la priorización de contenidos determinados por sobre otros, ciertamente constituye un aspecto de la agenda de todo tipo de medio, más allá de que este sea privado o público. No obstante, a continuación, se presentan las conclusiones a las que hemos llegado con el estudio, de manera que también sean una invitación a repensar el uso de los medios digitales en la política ecuatoriana, actualmente:
Existe un interés en informarse sobre la realidad nacional, sin que ello implique necesariamente acudir a fuentes gubernamentales. En es sentido, las fuentes por excelencia siguen siendo los medios tradicionales como canales de televisión, prensa o radio, pero en diferentes y renovados soportes. Esto, probablemente, se encuentra relacionado con la idea de que los medios de comunicación y el trabajo periodístico están al servicio de comunidad, de llegar a la ciudadanía con información objetiva, de modo que sea la misma audiencia quien decida. En cambio, se afirma la percepción de que los medios gubernamentales no están precisamente para llevar información simple y llana, sino para influenciar en la opinión pública y respaldar al gobierno. Lo cual, en cierto modo, es una idea que responde a la demanda ciudadana, por una mayor transparencia.
En ese sentido, la gente está ávida de información con la cual pueda tomar mejores posturas con relación a temas que conciernen a la ciudadanía. Hoy en día, los asuntos que mayormente movilizan el interés general tienen que ver con lo social y lo económico, transversales a la propuesta del gobierno actual.
Por otra parte, en lo que refiere al uso de medios digitales del gobierno, en particular sitios web y fanpages, según los resultados obtenidos, no se da con la frecuencia que se pensaría, aunque esto no tiene que ver con la familiarización con el uso, sino más bien con aspectos del contenido, la interacción y el tratamiento de la información. En otras palabras, a pesar de que, muchas de las veces se usa las redes sociales, en específico las fanpages, no resulta un hábito, sino que se acude por lo general a estos canales en momentos puntuales como es alguna noticia del momento.
En ese sentido, se opta por el uso de redes sociales como el Facebook y su herramienta fanpages, porque representa mayor comodidad o ahorro de tiempo, en tanto parte del contenido es factible que aparezca en el muro de noticias o como actividad de un contacto. Esto es algo que, en parte, se relaciona con lo mencionado por uno de los entrevistados, Fernando Zúñiga: “Es lo que pasa con la comunicación 2.0, es que la información muchas veces no las buscas, sino que te llega”. Así mismo, de acuerdo a Ricardo Medina, “el Facebook es la red social de mayor penetración en el país con cerca de 13 millones de usuarios del Ecuador registrados y cualquier entidad pública que quiera informar, debe de estar presente.”
Finalmente, y a pesar de que no hay un alto uso de fanpages gubernamentales, los resultados apuntan a una predisposición a hacerlo, con ciertas condicionantes, que tienen relación con los aspectos mencionados arriba: veracidad de la información, utilidad del contenido e interacción con la audiencia, que en conjunto se traduzcan a una experiencia de usuario más enriquecedera, tanto para la audiencia como para los equipos al frente de los canales digitales del gobierno.