Como participante de la industria musical en el departamento de prensa y comunicación, graduada en Publicidad y Relaciones Públicas, titulada en el Máster de Organización de Eventos en la Industria Cultural y del Entretenimiento y, finalmente, como estudiante del Máster en Marketing Digital, Comunicación y Redes Sociales, he querido dedicar mi proyecto final a unificar y analizar el nuevo paradigma que plantean los campos en los que me he formado académicamente, haciendo énfasis en las consecuencias producidas por la crisis del Covid-19.
Mi intención es que esta investigación y aplicación en un caso práctico, se conviertan en la base para poder llevar a cabo un proyecto musical en un futuro próximo. Para ello, me he marcado unos objetivos que consiguen respaldarse en una investigación, contextualizando el ambiente en el que se desarrolla la Industria musical y cómo las redes sociales llegan a influenciar en ella.
Además apoyaré y validaré mi hipótesis gracias a la participación de diversos actores dentro de la industria musical que, bajo el paraguas de la experiencia y la profesionalidad, darán voz a las necesidades y limitaciones a las que se ha visto expuesta.
General:
-Poner en valor la relación entre la industria musical y el marketing digital, concretamente las redes sociales, analizando cómo y para qué se utilizan en este ámbito, y aplicar las conclusiones obtenidas en la promoción y desarrollo de un proyecto musical.
Específicos:
-Analizar la situación socioeconómica tras la crisis del Covid-19 y su afección a las industrias culturales y creativas.
-Conocer las redes sociales que han colaborado en la promoción y difusión de contenido musical durante la crisis sanitaria.
-Escrutar la viabilidad y capacidad de adaptación de los eventos musicales a la digitalización a partir de los resultados obtenidos de la investigación realizada mediante entrevistas a profesionales del sector.
-Plantear un modelo de negocio a partir de los resultados obtenidos.
Tras la contextualización teórica del panorama musical actual y de como se ha visto afectado por la crisis sanitaria del Covid-19, podemos extraer una serie de conclusiones que ya planteaba en la hipótesis inicial. Las industrias Culturales y Creativas ha sufrido una caía monumental en términos humanos, de recursos y económicos y, aunque se ha planteado desde el gobierno un plan de recuperación, este va a ser lento y posiblemente no vea sus frutos hasta finales de 2022.Con respecto a la industria musical, hemos analizado su capacidad de adaptación al entorno digital.
Apoyándome en la investigación realizada, en la que han participado varios profesionales del sector, puedo concluir que los eventos musicales no han conseguido rentabilizarse mediante la digitalización. Al menos no en su totalidad, puesto que la venta de entradas triunfa por el medio online. Lo que sí podemos decir es que este nuevo paradigma digital ha abierto nuevas vías de comunicación entre artistas y fans, lo que ha generado la implementación de nuevas figuras dentro de la industria, como son los profesionales de la comunicación, para establecer una estrategia de contenidos que fomente y potencie la carrera profesional de los músicos.
A partir de estas conclusiones, surge la idea de llevar a cabo un proyecto empresarial, en el que se vuelve al modelo tradicional porque es lo que hace vibrar a los agentes participantes de la industria música, lo que a día de hoy funciona y lo está volviendo poco a poco a la normalidad. Eso sí, llevando de la mano a las redes sociales para el desarrollo e implantación de la compañía. Y sí, este es mi (nuestro) proyecto. Idealista y con unos claros valores sociales, eso es lo que lo hace especial. No se trata de una empresa más que lanzar al mercado para probar suerte, sino que se trata de unos ideales, de una lucha colectiva para darle voz a aquellas personas que no tienen. Así será La Bici Morada, luchadora y reivindicativa a la par que profesional y productiva, en un futuro no muy lejano.
Respecto a los objetivos empresariales tratados, me encantaría decir que está más que cumplidos, sin embargo no puedo asegurarlo al ser un proyecto profesional que todavía está en pleno proceso. Aún así, tras comentarlo y habiendo mostrado la idea empresarial a diferentes profesionales del sector allegados a nosotras, nos han ayudado a extraer una conclusión muy clara: las mujeres estamos cada vez más activas en todos los ambientes sociales, los proyectos feministas cada vez tienen más voz y más público (también masculino), lo que nos deja abierta una gran puerta que debemos cruzar sin miedo, pues es muy necesario que nos abramos paso en este mundo.