El mercado electrónico o ecommerce está en plena vía de expansión. Esto porque las empresas actuales buscan nuevas formas de llegar al cliente. Así el internet y el marketing virtual son las principales herramientas para enfrentar el reacio mundo del comercio globalizado. Sin embargo, el terreno recién se ha descubierto y cuando algo es nuevo, más sencillo es cometer errores.
Aunque es verdad que cualquier movimiento en el mercado actual puede generar algún riesgo para las empresas, el primer error, y quizá el más garrafal de ellos, es no entrar en el marketing online. De momento se ha garantizado que las ventas a nivel global gracias al comercio electrónico dirigido hacia el cliente, aspecto que se nombra B2C, crecerán al menos un 20% en el semestre final de este año. Garantizando ganancias billonarias, por lo tanto, no actualizarse demuestra poca visión hacia el futuro y descrédito comercial.
Deslices digitales
Algunas empresas se resisten a entrar en el ecommerce porque se han centrado en la atención al cliente en un espacio físico pero, son realmente muy pocas las marcas y las empresas que se aún no se suman a la era digital y que todavía mantienen sus productos en el mercado cumpliendo las perspectivas del cliente.
He aquí el siguiente error, el no cumplir con dichas expectativas referentes a las ofertas y servicios que promueven. Para no caer en él, las empresas deben tener muy en cuenta que al cliente se le vende el producto y la experiencia, se le debe cumplir con lo que se asegura o sugiere del primero y la variedad de la segunda.
Otra equivocación bastante común, es que cuando el comprador se muestra interesado, el vendedor intenta por todos los medios sacarle toda la información posible y querer que compre dos, tres, cuatro o más productos. Sin embargo, lo que puede suceder es que el cliente potencial se enfade y olvide por qué buscó a la compañía. En este caso debemos fijarnos en las páginas líderes en ventas, la persona ve lo que quiere, pincha y listo. No debe realizar nada más.
Tiempo y coste de envío
No colocar de forma sencilla y visible el tiempo y coste total del envío del producto también es un error. Dichos datos son lo primero que muchos clientes buscan en los sitios web y esconderlos en pies de página con tamaño de letra mínima o no colocarlos de manera clara, representará que la empresa no es digna de confianza y que esconde mucho más que un simple gasto de envío.
Por último debemos saber que el comercio digital funcionará como la ideal herramienta para nuestra empresa, solo si sabemos cómo y de qué manera utilizarlo. No se trata simplemente de crear un sitio en Internet o colgar nuestro logo en un perfil de alguna red social. El punto es llegar al cliente de forma rápida, sólida y eficazmente.