A día de hoy, uno de los sectores que más está de moda en Instagram es el de la alimentación y el estilo de vida saludable. Prácticamente a diario, perfiles de este sector comparten en esta red social recetas e información nutricional, habiendo tenido una formación previa, por ocio o por interés. En este caso, el 78,6% de los participantes de la encuesta preparada para esta investigación, respondida mayoritariamente por mujeres entre los 26 y los 35 años, ha indicado que sigue algún perfil de alimentación en Instagram.
A raíz de la popularidad de esta red social, muchos perfiles han nacido gracias a ella, iniciando la promoción de sus propias marcas y, con el paso del tiempo, han logrado posicionarse gracias al contenido que publican y a que su número de seguidores no ha parado de crecer. La utilización de esta red social para darse a conocer es un aspecto muy recurrente ya que es sencilla, permite alcanzar un gran número de personas sin ninguna limitación geográfica y con ella se pueden conseguir muy buenos resultados de forma gratuita.
El problema que puede surgir a la hora de publicar contenido relacionado con la salud es que, al no existir regulación en redes sociales, cualquier persona que cuente con un número elevado de seguidores se considera fiable y puede hacer creer a su comunidad que es experta en el tema que está tratando. No tiene por qué dedicarse exclusivamente a la alimentación, sino que muchos perfiles de influencers de lifestyle, al mostrar constantemente su día a día, también enseñan el tipo de alimentación que siguen y muchos de sus seguidores fieles es probable que imiten su comportamiento. Como su propio nombre indica, estos perfiles tienen, en mayor o menor medida, influencia sobre sus seguidores, sobre todo, entre el público más joven.
La encuesta lanzada en este trabajo indica que el 81,8% de los participantes, es decir, ocho de cada diez, admiten haber tenido en cuenta los perfiles de Instagram a la hora de cambiar su estilo de alimentación. Esto ocurre, sobre todo, entre mujeres jóvenes entre los 26 y 35 años. Si el perfil que se ha tenido en cuenta a la hora de cambiar el estilo de alimentación hacia uno más saludable no tiene formación nutricional, sino que simplemente aborda temas sin contrastar y ofrece consejos que considera correctos, pero que no son reales, puede suponer un problema de salud para el usuario de Instagram.
Por este motivo, para esta investigación se han utilizado tres métodos de estudio: análisis de contenido de cuatro perfiles seleccionados que tienen conocimientos necesarios, ya sean culinarios o nutricionales: @futurlife21, @foodtropia, @nutriaconsejame y @realfooding; una encuesta y una entrevista en profundidad. El objetivo de estos cuatro perfiles es tratar de concienciar a sus seguidores de lo que incluyen en su dieta y de alimentarse de forma saludable, eligiendo los mejores productos para ello.
En primer lugar, esta investigación ha tratado de analizar el tipo de contenido que ofrecen los perfiles seleccionados y estudiar la influencia que causan en sus seguidores, pretendiendo conocer si la existencia de estos perfiles es lo que ha provocado un cambio en el modo de alimentación de los usuarios de Instagram. Se ha podido comprobar que el perfil de estos usuarios que, efectivamente, siguen este tipo de alimentación influenciado o no por Instagram es, sobre todo, femenino y suele estar más presente en jóvenes de entre 26 y 35 años.
Entre los perfiles seleccionados cabe destacar que el de @realfooding es el que mayor presencia tiene en Instagram y, entre los encuestados, un 55,9% de ellos son seguidores suyos. El 26,2% de los participantes de la encuesta sigue a @futurlife21, seguido de @foodtropia con un 16,9% y por último, el 7,6% de los encuestados sigue a @nutriaconsejame. En cuanto al contenido que publican tanto en stories como en formato post, los cuatro perfiles tienen muchos aspectos en común. Todos intentan transmitir a sus seguidores un sentimiento de cercanía y de formar parte de un grupo, preguntan por el contenido que les interesa y tratan de fomentar la interacción en muchas de sus rutina. Se podría decir que la presencia de estas cuentas ha sido un punto clave para que una gran cantidad de público cambie su modo de alimentación.
Tal y como se puede extraer de la entrevista en profundidad, lo ideal sería que ese cambio fuese fomentado por perfiles que tuviesen formación previa y que los usuarios no se hubiesen visto influenciados por información que puede no ser veraz e incluso perjudicial para su salud. A pesar de ello, existen perfiles como el analizado en la entrevista que, aunque no cuentan con formación previa, contrastan la información que publican para garantizar que el contenido que ofrecen pueda ser beneficioso para la salud de sus seguidores.
Por último, la existencia y la popularización de estos perfiles están, claramente, ligado sal interés de los usuarios por una alimentación saludable. Como se ha visto en los resultados de la encuesta y de la entrevista en profundidad, son muchos los motivos por los que los se empieza a seguir a estos influencers. Entre los encuestados destaca la búsqueda de nuevas recetas, en cambio, la presión social podría ser otra de las razones principales, según la entrevistada. En todo caso, lo que está claro es que se ha utilizado Instagram como herramienta para buscar información.
Por todos estos motivos, se considera positiva la existencia de información que fomenta una alimentación saludable en redes sociales y se podría decir que es una buena opción para ofrecer educación nutricional por parte de profesionales de este sector. Sin embargo, al tratarse de un tema muy relacionado con la salud, se debería de poder cribar según el contenido y la información que se va a proporcionar para evitar causar desinformación entre los usuarios.