Aunque se viene comprobando que el uso del teléfono móvil es el elegido para navegar, comprar y jugar por los usuarios, lo cierto es que no se ha conseguido el volumen de ventas que se esperaba.
Es cierto que se ha vendido un 26,3% más que el año pasado, pero no se llegará a la cifra de 1.400 millones de unidades vendidas que se preveía para 2015 en el mundo.
Según un estudio realizado por “IDC” los envíos de estos dispositivos llegarán únicamente hasta los 1.300 millones en todo el mundo y en los próximos años seguirá descendiendo.
Los expertos afirman que este crecimiento únicamente rondará el 9,8 %. También los ingresos de las empresas se verán reducidos al bajar el coste de sus productos.
Se han puesto de moda los dispositivos móviles de marcas asiáticas más económicas como Xiaomi, Lenovo, Huawei y ZTE que ofrecen características de gama alta a menor precio que el resto de fabricantes. Xiaomi es la que más éxito está teniendo.
La iniciativa de estas compañías chinas ha sido para poder ofrecer a los usuarios de estos países en desarrollo la posibilidad de acceder a esta tecnología.
Mientras tanto, en otros países, Sony y Samsung han decidido reducir su catálogo de smartphones frente al temor a la pérdida del interés por parte de los usuarios. Si recordamos, el último dispositivo creado por la marca Samsung no ha tenido la acogida esperada entre los usuarios fieles a esta marca.
En 2014 el precio de los teléfonos móviles inteligentes se ha reducido en torno a 297 dólares de media y se espera que en 2018 la rebaja sea hasta los 241 dólares.
Según los análisis se espera que Android siga siendo el sistema operativo más utilizado con 80% del mercado, iOs con un 13% y Windows Phone con el 5,6 % de cuota de mercado.
Maria C.
