Aplicaciones y más aplicaciones. Así es como tenemos nuestros smartphones y tablets: llenos de aplicaciones por todos lados.
En los últimos dos años, el uso de smartphones y tablets ha ido creciendo de forma muy rápida. Estamos enganchados al móvil, ya que nos permite comunicarnos donde y cuando queramos en tiempo real. En definitiva, somos más mobile que nunca, siendo la descarga de aplicaciones una de las acciones más habituales que realizamos.
Si este es el comportamiento del usuario y si, además, más del 63% de las instalaciones de estas aplicaciones vienen de búsquedas en la App Store (iOS) y en Google Play (Android), significa que debemos intentar estar presentes en las primeras posiciones.
Posicionar nuestra aplicación en las búsquedas que realizan los usuarios no es tan complicado. Al igual que cuando hablamos de posicionamiento web hacemos referencia al SEO, en el caso de las aplicaciones móviles hablaríamos de ASO: App Store Optimization.
Podríamos decir que ASO es el mismo concepto que SEO pero aplicado a las tiendas de aplicaciones, es decir, es un conjunto de técnicas que se aplican con el objetivo de conseguir aparecer en los primeros resultados de búsqueda en las tiendas de aplicaciones móviles, siempre buscando alcanzar el mayor número de descargas.
Dentro de la estrategia ASO nos encontramos con factores parecidos a los ya existentes en mundo del SEO. En líneas generales, para llegar a la cumbre ASO cuenta con:
– Keywords Search
– Optimización on-metadata (title, description, keywords…)
– Optimización off-metadata (número de instalaciones, velocidad de descarga, social signals, linkbuilding…)
– Popularidad (número de compras, la calidad y la cantidad de reviews…)
Como consejo, y siguiendo el hilo con el que comenzamos este artículo, si los usuarios están en el móvil y descargan aplicaciones, todo indica que debemos marcarnos una estrategia de app marketing dentro de nuestra estrategia global de marketing digital.